“Los blogs fueron vistos en un principio como una revolución de la publicación, que abrió el mundo de los medios a los consumidores. Hoy en día, la creación en estas plataformas está en declive;  y los profesionales vuelven a estar al mando en lo que se refiere a los contenidos. Esto hace que la oportunidad para las marcas y las compañías de medios sea aún más convincente“.

Releo de un también reciente libro de Manuel Castells:

“Mi hipótesis, que será sometida a prueba, es que cuanto mayor sea la autonomía que las tecnologías de la comunicación proporcionen a los usuarios, mayor será la probabilidad de que entren nuevos valores y nuevos intereses en el reino de las comunicaciones socializadas”.

El profesor Castells tenía razón: su hipótesis está siendo sometida a prueba, y en buena parte desmentida. Porque:

• La mayoría de los usuarios aprovechan (aprovechamos) sólo de un modo muy limitado la autonomía potencialmente disponible.
• Las mismas fuerzas que colonizaron los medios de comunicación tradicionales están también pasando a dominar los nuevos medios sociales. No las mismas marcas, no los mismos grupos, no los mismos accionistas. Pero sí los mismos impulsos.

El informe citado da para estirar más hilos. Por hoy basta con éste:

¿Estaríais de acuerdo en que el potencial de contra-cultura de los Social Media se está diluyendo en la práctica?