La contrapartida a trabajar

Siempre que surge una iniciativa que pretende ser una forma de dirigir al ser humano hacia el progreso, nacen también algunos que en beneficio exclusivamente suyo se benefician de las aspiraciones universales del colectivo.

Es lo que sucede con los MOOC, cursos online de alcance masivo que por lo tanto pretende superar la distancia entre el alumnado y los centro intelectuales, que por desgracia ya tienen su contrapartida negativa.

No es nada nuevo afirmar que los verdaderos problemas del estado español se hallan en los altísimos números registrados por el paro. Encontrar un trabajo, “lujo” del que solo 3 de cada cuatro españoles disfrutan, es actualmente una tarea harto complicada.

Es por este motivo que algunas empresas aprovechando la endeble situación del mercado laboral, han encontrado una forma barata y sencilla de tener mano de obra a un precio irrisorio: los MOOC o curso online.

Así, aquellos alumnos recientemente matriculados sólo tienen que apuntarse a uno de esos cursos para que la empresa contratante pueda seguir empleándolos pagando impuestos y sueldos bajos.

Por su lado los alumnos que se avienen a dicha situación, no pueden en absoluto ser culpados de nada. Intentando preservar algún tipo de trabajo que no detenga su formación, sólo tienen que pagar, en los casos más extremos, 150 euros. A cambio no acaban en las filas del paro y cobran un sueldo mísero que no pasa de los 1000 euros en ningún caso.